EL PROBLEMA DE LA PRODUCTIVIDAD SEGÚN PETER DRUCKER.
EL DILEMA DE LA PRODUCTIVIDAD.
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De acuerdo con Peter Drucker estaremos
enfrentando a principios del siglo XXI el problema de la productividad. ¿Cuáles son las razones que llevan a Drucker
a hablar de esa manera?
Sabemos que estamos enfrentando
ambientes sumamente dinámicos y complejos, caracterizados por cambios
constantes y presiones de distintos factores que están modificando
continuamente el ecosistema organizacional.
No estamos hablando solo de las
organizaciones privadas, sino también de las públicas que están sometidas a una
constante presión buscando eficiencias.
Ya no pueden depender exclusivamente de la presión impositiva que
ejercen como gobiernos a sus ciudadanos, ya que éstos a su vez, están afectados
por fuertes cambios y presiones de la economía que los obliga de una manera u
otra a tomar medidas que les permitan ser más productivos.
Los cambios han hecho que en los
últimos 40 años las empresas cambien su estructura organizacional por configuraciones
más planas, eficientes y efectivas. La
organización piramidal que antes era el modelo a seguir, está dando paso,
obligadas por el dinamismo que debe tener la organización, a estructuras
hibridas que combinan las ventajas de los distintos diseños piramidales,
lineales y matriciales, creando disposiciones más ajustadas, activas y eficaces
que reducen costos, pero integradas a su vez, por personal más especializado y costoso
por las habilidades y competencias que se requieren en los nuevos ambientes.
Por otro lado, las propias estructuras
en ese afán de aumentar la productividad han dado paso a la contratación de
organizaciones de distintos tamaños, abriendo espacio a la marca personal, que
no son más que microempresas muy especializadas, que operan en nichos de
mercado muy específicos.
Esto trae como consecuencia
situaciones de gestión que es necesario revisar dadas las características de
estas relaciones. Como dice Rafael Echeverría: “las organizaciones son
entidades lingüísticas basadas en conversaciones.” Y de alguna manera muestra
preocupación ante los cambios que están dando dichas organizaciones en los
ambientes actuales.
Pero, ¿Dónde reside el problema?
En primer lugar, de acuerdo con
Drucker, pasamos de un ambiente de trabajo manual a uno no-manual. ¿Qué sucede
en estos casos?
En el pasado, se habían desarrollado
mecanismos de gestión que permitían medir, inventariar, contabilizar, etc.,
todos los elementos que eran parte de la producción de la empresa. Sin embargo,
nos encontramos con un problema en relación al trabajo no-manual. Y éste se encuentra en la manera de medirlo,
contabilizarlo y gestionarlo.
Los nuevos trabajadores pertenecen al
área del conocimiento. Son trabajadores especializados y la pregunta que queda
en el aire es ¿Cómo hacemos para administrar el trabajo?
Claramente es difícil saber cómo medir
el avance que se hace en un programa de software, en un plan de marketing
digital, en términos de diseño de productos, manejo de campañas, alineación de equipos
o en formaciones de personal. ¿Cómo
medimos los avances y beneficios futuros? ¿Cómo saber si estamos siendo
productivos? ¿Cómo calculamos la eficiencia y la eficacia del proceso?
Es allí donde aparece el dilema de la
productividad, ya que es para nosotros fácil medir qué se hace en el trabajo
manual, a diferencia de lo que sucede en el trabajo no-manual. En paralelo,
como decía Russel Ackoff en relación a la distinción hecha entre eficiencia
(“doing things right”) y efectividad (“doing the right thing”).
Ahora quisiera agregar algo más a esta
discusión y tiene que ver con los efectos de los nuevos ambientes en los cuales
estamos trabajando. La pandemia nos obligó
a diseñar nuevos esquemas de trabajo. A pesar de que el tema es conocido desde
hace tiempo, el formato online se hizo muy popular durante la situación de pandemia,
fundamentalmente porque permitía trabajar desde casa y no paralizar las
actividades.
No olvidemos que fueron momentos duros
y muy difíciles para muchas personas que perdieron sus ingresos como
consecuencia de empresas que cerraron a raíz de la declaración de
pandemia. Esta alternativa, el trabajo
online, surge con mucha fuerza debido a la necesidad de seguir operando y
generando ingresos. Sin embargo, en ese momento surgieron muchas dudas a nivel
de cómo gestionar efectivamente estos ambientes.
Hoy día, luego de haber finalizado esa
situación, se presentan abiertamente tres ambientes alternativos que manejan
distintos esquemas de gerencia:
1. Ambiente presencial.
2. Ambiente online.
3. Ambiente hibrido.
Los mismos trabajadores han presionado
por mantenerse al menos en un esquema hibrido, ya que en su experiencia el
trabajo online les permitió tener un mayor acercamiento a su entorno familiar,
además de los ahorros obtenidos consecuencia de la reducción de viajes o
traslados, reuniones en distintos lugares, que han sido cambiadas por otras opciones
más efectivas, empleando herramientas de videoconferencia, correos, programas y
otros, que han optimizado los encuentros, reuniones, seminarios, entrenamientos,
etc.
Sin embargo, esto también genera un
tema importante, que es necesario considerar y resolver, el cual es cómo la
empresa se hace responsable de los gastos en los que incurre el empleado, como resultado
de su trabajo remoto, ya que en muchos países aún no existe una clara
legislación acerca del Tele-trabajo, donde el trabajador emplea sus propios recursos
para beneficiar a la empresa, quien mantiene el pago exclusivamente por la
ejecución de la labor, sin tomar en cuenta el uso de equipos y servicios
pagados por el empleado, que impactan y mejoran las utilidades de la empresa.
Este es un tema importante a considerar para estos ambientes futuros.
Por supuesto existen otro tipo de irregularidades,
como por ejemplo empresas en línea, que quieren aprovecharse del costo de la
mano de obra de países menos desarrollados, pagando mucho menos por el mismo
trabajo que harían expertos de sus propios países. Podemos entender que esto es
parte de las leyes del mercado, las cuáles se irán ajustando gradualmente. Lo
que no comparto es que se pague menos del 50% por la misma labor realizada por
un profesional con idénticas calificaciones. En mi opinión, creo que es un
abuso.
Los nuevos trabajadores digitales también
son responsables del tema de servicio, que se ha convertido para muchas
empresas, en una cuestión de Ventaja Competitiva. Empresas como IBM y Apple han
dirigido su atención al tema de servicios para potenciar el crecimiento de sus
empresas en los próximos años. Empresas como Amazon y Alibaba compiten
fuertemente en esta materia. Sin duda alguna el sector financiero también
enfrenta retos similares. Veremos qué depara
el futuro en este sentido, cómo se adaptan las organizaciones a los nuevos
tiempos, y además que nuevos desarrollos aparecen para ofrecerle al cliente
respuestas rápidas y satisfactorias a sus necesidades, que además permitan
crecer y posicionar a las entidades en nichos de mercado para generar valor a los
negocios.
Del lado de las empresas también es
importante considerar cómo pueden ellas medir la eficiencia y calidad del trabajo
que realiza el empleado. Es aquí donde
entra el tema de la gerencia remota o gerencia digital, que necesita emplear
una serie de herramientas diferentes a las acostumbradas, para evaluar el progreso
de la actividad. De la misma forma, surge
la pregunta acerca de cómo liderar equipos remotos compuestos en ambientes
multi-generacionales, multiculturales, multitarea, con distintas profesiones e
intereses. Hay mucho adelantado por los
países de Asia quienes desde hace tiempo vienen trabajando con esquemas de ese
tipo. Sin embargo, para nosotros es bastante novedoso.
Este tema también genera la interrogante
acerca de cómo alinear equipos de trabajo situados en diferentes ubicaciones de
tiempo y espacio, e inclusive, cómo gestionar equipos de trabajo no-manual y
lograr desempeños efectivos en dichas ubicaciones.
Estamos frente a fuertes retos
generados por ambientes VICA que exigen cambios en los paradigmas gerenciales. Las
organizaciones, empresas y mercados están transformándose aceleradamente y
exigiendo respuestas cada vez más rápidas y certeras acerca de cómo tratar
estas situaciones.
Sin duda alguna, esto generará retos
interesantes que impactarán la forma de entender y hacer las cosas en los
próximos años. Sin temor a equivocarme, las organizaciones que no tomen las
medidas necesarias para trabajar en estos nuevos ambientes, se enfrentarán a
duras consecuencias como resultado de la inacción o acción insuficiente.
CONTACTO:
Mi nombre es Francisco De Lisa. Soy emprendedor y me dedico a
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